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-Robert querido. ¿Cómo estás pasando el fin de semana?- dijo Jocelyn.

-¡Oh! Jocelyn qué agradable escuchar tu voz. Estoy bien, hoy está haciendo mucho frío aquí en Italia.

-¡La verdad, mucho frío! Tengo buenas noticias, estoy segura que te agradarán.

-¿Algún progreso en nuestro proyecto?- dijo Robert entusiasmado.

-No, algo mucho mejor.  Ayer en la noche, terminé de leer Viaje al Centro de la Tierra de Julio Verne y pienso que hay algo escondido tras esa novela, creo que a raíz de una muy buena investigación se puede llegar al centro de nuestro planeta.

Robert no emitió ningún sonido por algunos segundos. Luego respondió.

-¿Estás loca? No pienso arriesgar mi vida porque se te metió esa extraña idea en la cabeza. Jamás emprendería un viaje tan absurdo.

-Pero, solo piensa un poco. ¿Por qué crees que escribió todo eso? No fue mera literatura ni imaginación –dijo Jocelyn entrecortadamente.

-Si sigues con todos estos delirios tendré que cortarte, lo siento –Robert parecía algo enojado.

-Solo escúchame un momento y te diré porqué creo que es verdad.

-Está bien, argumenta todo lo que quieras, pero no creo cambiar de opinión.

-Bien, solo escucha. –Jocelyn se calló unos segundos-. Estuve investigando los volcanes de Islandia y llegué a la conclusión de que todo es posible. El Sneffels sí existe, no es muy conocido ni es tan grande. El documento de Saknussemm también existe, se encuentra en un museo de Islandia. Podemos ir y pedir si nos dejan descifrarlo…

-No nos dejarían ni tocar ese documento. –Interrumpió a Jocelyn.

-Dije que solo escuches. –A su vez, la científica interrumpió a Robert.- Otro dato que encontré es que dentro del volcán hay 3 túneles y el libro dice que, solo al que la luz solar no le llega, es el camino indicado para continuar con la expedición. Piénsalo, hay varios datos reales. Nos llenaremos de dinero y fama, seremos los científicos más conocidos y famosos del mundo -Jocelyn estaba realmente emocionada-. Contamos con instrumentos de alta tecnología, siempre estaremos conectados con otros científicos.

-Si estos datos pudieran ser reales, cómo lograríamos llegar a Islandia- dijo Robert con un tono desafiante.

-Eso no es un problema mi querido amigo, la solucion es simple, viajaremos en tren hasta Dinamarca como hizo el Profesor Linderbork y luego nos embarcaremos en barco hacia la hermosa y maravillosa Islandia, o si deseas ir en avión podemos comprar ya mismo los pasajes…

El viaje de Robert

 

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